EL OTOÑO, EL DESAFÍO DEL PULMÓN
Ya
ha llegado el otoño, anochece más temprano, los árboles pierden sus hojas,
comienza a hacer más frío… y como es de esperar, todos estos cambios tendrán
repercusión también en nuestro organismo.
Desde
el punto de vista de la Medicina Tradicional China (MTC), es la época de máxima
acción del elemento metal, que se asocia
al Pulmón y al Intestino Grueso. Estos dos órganos tienen unas funciones muy
importantes dentro de nuestro organismo, pero una de las más importantes es la
función de defender al cuerpo de ataques externos, es decir, una función
defensiva frente a los resfriados, virus y bacterias, que es lo que más vamos a
ver en esta época del año. Además se relaciona, a nivel emocional, con el
instinto de supervivencia, ganas de vivir y de seguir adelante ante las
adversidades. Una buena energía del Pulmón hará que seamos personas más
luchadoras y que tengamos unos reflejos neurovegetativos más activos, una voz
más fuerte y que nuestra postura se vea erguida, con los hombros rectos y hacia
atrás, con ganas de enfrentarnos a lo que el mundo nos depare. La energía de
Pulmón se manifiesta también en el
estado de la piel, por ello, problemas de piel como eccemas, erupciones,
alergias, acné, etc… nos hablan de un mal estado de su energía y de que hay que
prestarle más atención.
En
el otoño, el elemento Metal está muy activo, ya que tiene que luchar
continuamente con los ataques externos, con el frío, el viento, virus,
bacterias, etc… es la época de los resfriados, y todo esto conlleva un gran
gasto de energía. Es por ello por lo que tenemos que tener especial cuidado y
ayudar al Pulmón a mantener su Energía lo más alta posible. Si a nuestro Pulmón
“se le acaban las pilas”, seguramente entraremos en ese círculo vicioso de resfriados
del que muchos no logran salir hasta la primavera.
¿Qué
podemos hacer para elevar la energía del Pulmón? pues muy sencillo, vamos a
tonificarla con una de las actividades que realizamos todos los días varias
veces, la alimentación.
En esta época del año vamos a
elegir alimentos de Energía neutra, que equilibran el organismo y de naturaleza
templada, que tonifican la energía. Además utilizaremos un poquito de picante,
que en pequeñas cantidades tonifica la energía del Pulmón, pero sin pasarnos,
porque si nos excedemos obtendremos el efecto contrario.
Y por último, las
cocciones que utilizaremos serán más largas, haremos guisos, estofados,
alimentos a la plancha, algún horneado, sopas y hervidos, y trataremos de
evitar los alimentos crudos y fríos.
Cereales: arroz, cebada, avena
Semillas oleaginosas: pipas de
calabaza, de girasol, sésamo, almendras (mejor crudas, muy buenas para la tos
seca), castañas y nueces
Vegetales, mejor pequeños y de
color blanco, que tienen afinidad por el Pulmón: coliflor, nabo, cebolla, ajo,
hinojo, patata pequeña, y otros vegetales como brócoli y coles de bruselas
Legumbres: soja, lentejas,
garbanzos y azukis
Pescado blanco y azul
Algas, huevos ecológicos,
cantidad moderada de carnes magras: pollo, ternera y pavo
Frutas de otoño de forma
moderada: naranja, mandarina, manzana…
Plantas aromáticas: tomillo,
romero, salvia…
Lácteos con moderación, sobre
todo si estamos resfriados, ya que producen flema y moco dentro del organismo.
A continuación os ofrezco dos
recetas de tisanas para el resfriado, momento en que el Pulmón tiene que luchar
contra los patógenos externos:
1.- Tisana o Infusión de Jengibre
y Canela:
La utilizaremos en el momento en
que notamos que hemos cogido frío, cuando sentimos escalofríos, dolor de
cabeza, mucosidad líquida y transparente en la nariz, es decir, al principio
del resfriado. Nos ayudará a calentar el cuerpo y a expulsar el frío que nos ha
atacado.
Para una taza: una rodaja gruesa
de jengibre fresco, una ramita de canela, el zumo de medio limón y una taza de
agua. Se raya el jengibre (con la piel) y se pone a hervir en el agua con la
ramita de canela unos 10 min. Se exprime medio limón en una taza y se vierte la
infusión en la misma colándola con un colador.
Se puede tomar tres veces al día.
2.- Té de mejorana:
Se utiliza cuando el resfriado ya
ha avanzado, cuando tenemos mucho dolor de cabeza, fiebre, ojos rojos, dolor de
garganta y mucosidad amarilla y espesa.
Para una taza: añadir una
cucharadita de mejorana a una taza de
agua. Poner a hervir y cuando rompa, reducir el fuego y dejar hervir a fuego
lento 15 minutos, retirar y tomar.
Se puede tomar esta tisana 3
veces al día.
Así
que, vamos a enfrentar el otoño con energía, a plantarle cara con los hombros
bien altos, la garganta bien tapada con una buena bufanda, los riñones
cubiertos y calentitos, y con todos los buenos alimentos en la recámara para
mantenernos fuertes y sanos frente a los molestos resfriados.
Rebeca Olivares Pérez
Fisioterapeuta y Técnico en MTC y
Dietoterapia Centro Samsara